Después de todo, la famosa frase “comer por los ojos” es muy cierta. La Universidad de Oxford realizó un estudio y llegó a la conclusión de que la gente come por los ojos y está dispuesta a pagar más por los platos que les parecen más atractivos.
La verdad es que un plato con una mala presentación será mucho menos atractivo que un plato con una buena presentación, incluyendo la disposición de los ingredientes, así como el tipo de platos que utilice. Básicamente, no importa a primera vista cuál es el más sabroso, aunque antes de probarlo no hay forma de saberlo, así que la apariencia determinará la elección.
Intente encontrar la armonía perfecta entre los elementos que componen el plato. Céntrese en crear la manera de disponer cada porción, la manera de colocar las salsas y a todos los demás componentes que forman parte de ello… sin olvidar el plato en sí mismo.
La colección elegida marca la diferencia y a veces puede ser incluso la clave, cuando visualmente la comida es más sencilla. Centre su atención en crear una buena composición, dando un poco más de protagonismo a uno de los alimentos del plato y teniendo en cuenta todas las demás cuestiones mencionadas.
Si todavía usted es un principiante nel emplatado, en cuanto a la elección de los platos que llevarán la comida, le aconsejamos que elija colecciones más sencillas, con trazos menos fuertes y colores más claros, ¡pero con refinamiento! Así, será difícil que falle. Costa Verde ofrece varias gamas con un estilo más simplista, como el Saturno Coupe o el Agma, también sencillo, pero con un toque de color que le da un buen toque.
Hablando de armonía, será importante que haya cierta coherencia entre los colores, las texturas y todo lo que formará parte de la comida. Recuérdese también de equilibrar adecuadamente, según sus necesidades, la cantidad de verduras, proteínas y carbohidratos.
Al final, no olvide añadir su toque mágico, no deje de lado su imaginación y creatividad. ¡Practique!