Costa Verde lanzó el proyecto MyCostaVerde en finales de 2018. El objetivo principal de esta iniciativa era recoger y compartir historias y experiencias personales de antiguos empleados de la empreza, ahora jubilados. Estos trozos de vida, recordados en primera persona, ayudan a contar la historia de Costa Verde a lo largo de sus casi 30 años de existencia.
A menudo, las palabras inspiradoras de estos testimonios sirven como fuente de motivación para los empleados actuales. Hoy en día, más de 300 personas trabajan en esta fábrica de porcelanas, que sigue contribuyendo cada día al éxito y el crecimiento de la empreza, fundada en 1992.
Fue en 2009 que Carlos Alberto Lopes se jubiló, por problemas de salud, después de 13 años dedicados a la empreza. Su primer trabajo en la planta fue como hornero, pero más tarde se hizo cargo como jefe de turno.
Habiendo trabajado anteriormente en la pesca del bacalao, por más de 25 años, recuerda con nostalgia los años pasados en Costa Verde. Destaca el espíritu de camaradería que se vivió y el respeto que la empreza siempre tuvo por sus empleados.
Hoy en día, reconoce que “Costa Verde es diferente, ha evolucionado mucho”. De su época, Sr. Carlos recuerda que todos trabajaban para el crecimiento de la empreza. Por lo tanto, el mensaje que quiere dirigir a los empleados actuales es simple: “Hagan lo mismo que los antiguos hicieron”. ¡Esta es la única manera de seguir creciendo!
Fue en 1994 que José Armando Nunes dos Santos comenzó sus funciones al servicio de Costa Verde. A lo largo de los 22 años que trabajó en la empreza, siempre ha sido un agente de seguridad e mantiene, hasta hoy, buenas memorias de aquellos tiempos. Afirma haber hecho muchos amigos y refuerza el buen ambiente de trabajo que tenía allí, no sólo entre los colegas, sino también con la administración. “¡Si pudiera, seguiría trabajando!”, declara con entusiasmo.
José Nunes dos Santos recuerda uno de los momentos más notables que vivió como empleado de Costa Verde. Estaba trabajando cuando, durante una violenta tormenta, los fuertes vientos arrancaron parte de la estructura del techo de la fábrica. Afortunadamente, recuerda, fueron sólo daños materiales, nadie resultó herido.
Hoy, el mensaje que quiere dejar a los actuales trabajadores es que “mantengan siempre una buena dinámica”. Sean buenos empleados de la empreza, porque ella se lo merece”. “Todo el tiempo que he trabajado aquí he pensado así y todavía sigo a pensarlo”, asume, añadiendo: “Costa Verde fue muy importante para mí porque pasé los mejores momentos de mi vida aquí, hasta el momento de mi jubilación”.
El proyecto MyCostaVerde es una forma de honrar a los antiguos trabajadores, que nos dieron tanto. En Costa Verde conocemos el valor de nuestros recursos humanos y trabajamos para reconocerlo cada día, con un compromiso permanente de su formación y valoración personal.
Si hoy en día somos uno de los productores de porcelana más respetados, con una fuerte presencia en la restauración y hotelería de todo el mundo, es gracias a todas estas personas.
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